• En encuentro ha contado con el apoyo del Gobierno de Cantabria y del propio Ayuntamiento de Solórzano

Solórzano 17 / abril / 2023.-  La antigua Casa Quintana, hoy reconvertida en albergue juvenil ‘Gerardo Diego’ y que fuera propiedad de don Antonio Maura, presidente del Consejo de Ministros que eligió estos parajes para descansar y practicar la pintura de paisajes, ha acogido una jornada con el eminente político mallorquín de protagonista, reuniendo a más de medio centenar de vecinos en torno a la figura de Maura como político, pero también como artista e intelectual. 

Según ha manifestado la alcaldesa, Gema Perojo, esta jornada ha servido además para “resaltar que el municipio y la región siguen disfrutando de las condiciones y circunstancias que mueven a tantos visitantes a recorrer cada año, tal como hiciera don Antonio Maura, sus atractivas rutas y senderos, la inigualable propuesta cultural y patrimonial de un destino recogido y reconfortante”.

Celebrada el pasado sábado 15 de abril, ha contado con el apoyo del Gobierno de Cantabria y del propio Ayuntamiento de Solórzano, cuya alcaldesa fue la encargada de abrir el turno de intervenciones, lo cual hizo acompañada por la directora general de la Juventud, Marina Bolado y el coordinador de la jornada, Francisco Javier Fernández Gómez, que realizó un esbozo de la presencia de Antonio Maura durante trece años en Solórzano, un periodo de tiempo en el que el político e intelectual mallorquín además de ocupar la presidencia del gobierno,fue miembro de varias Reales Academias: De La Española desde 1903, siendo director desde 1913 hasta el 1925; de Jurisprudencia y Legislación, presidiéndola de 1894 a 1895; de Ciencias Morales y políticas; y de Bellas Artes de San Fernando, como reconocimiento a sus dotes de acuarelista. 

Precisamente el perfil intelectual y su faceta artística, han sido el tema de debate y la intención misma de esta jornada de Historia, que además de reconocer a la figura de Maura como estadista, se ha preocupado de poner énfasis en su carácter de hombre culto y dotado de una especial sensibilidad artística. 

El numeroso público asistente – la sala se ocupó en su integridad y fueron muchos los que siguieron la misma desde los laterales de la sala e incluso desde el pasillo de entrada – pudo comprobar durante la proyección de ‘Las acuarelas de Maura’, la excelente factura de las acuarelas de Antonio Maura, la delicadeza en el tratamiento del color y la calidez de unos paisajes que, siendo hoy reconocibles muchos de ellos, nos trasladan a unos tiempos que, aún siendo complejos y delicados, Maura supo describir en ellos los modos de vida y el espíritu de una época con la sola ayuda de un pincel. 

‘Conoce a Solórzano y su historia’, jornada cultural 

El turno de intervenciones corrió a cargo del periodista y profesor de Historia del Arte, Bernardo Romero, el cual realizó un entretenido recorrido por las condiciones económicas y las infraestructuras de la época, sirviéndose para ello de los traslados que anualmente realizaba el presidente del gobierno a esta Casa Quintana de Solórzano, lugar en el que el político e intelectual pudo descansar de la intensidad de una vida política que recorrió momentos de extrema dificultad, así como dedicarse a su afición favorita, la pintura. 

En la segunda intervención, Manuel Ros, doctor en Historia Contemporánea, trazó el perfil político de Antonio Maura, explicando esos momentos cruciales en su devenir como presidente del gobierno, ofreciendo una visión pormenorizada de los problemas a los que se enfrentó, centrándose en los relativos al norte de África y el conocido desastre del barranco del Lobo, que acabarían desencadenando la Semana Trágica de Barcelona. Estos sucesos provocarían el final del conocido como periodo largo de Antonio Maura al frente del gobierno, algo de lo que Alfonso XIII declaró en su exilio romano sentirse arrepentido. Manuel Ros, dio cuenta además de los proyectos que no pudo llevar a cabo por esta causa el político mallorquín, como el intento de acabar con el poder del cacicato en la península, la reforma del sistema educativo, o poder avanzar en la instauración de una democracia plena, recordando que ya en 1903, Antonio Maura por vez primera acabó en el célebre turnismo y el consiguiente amaño de las elecciones. 

La faceta artística de Antonio Maura protagonizaría la tercera y última de las intervenciones, que corrió a cargo del secretario general de la Fundación Antonio Maura, Alfonso Pérez-Maura, que además de sus estancias en Solórzano y en otras localidades de Cantabria, dio cuenta de las acuarelas que el político realizó en innúmeras jornadas de pintura al aire libre en compañía de grandes pintores de la época, como Santiago Rusiñol o Gonzalo Bilbao, o sus relaciones con intelectuales de la talla de Benito Pérez Galdós, con quien mantuvo una cordial relación de amistad. También hizo referencia el descendiente del político mallorquín a la visita del rey a Solórzano, donde estuvo alojado en esa misma Casa Quintana que ha acogido una jornada que finalizó con la proyección de la película “Las acuarelas de Maura”, presentada por Manuel Sayans, hijo del director de la cinta Manuel Sayans Orcoyen.